Historia
Ya de la época Romana existen importantes restos de una Villa en la partida de los “Terreros de Zorrilla”, de donde procede una interesante inscripción funeraria actualmente colocada en la fachada de la Iglesia Parroquial. Pero el momento en el que podemos situar el origen del actual emplazamiento de Azuébar se establece en la Época Islámica, momento en el que se construye el Castillo de Azuébar, al que se asociaría una pequeña alquería denominada AZUBEBA en el “Llibre del Repartiment”. También a este período pertenecen los cercanos asentamientos de “Las Tablas del Mercado”, de “ La Peña Asolá” o del “Collado de los Moros”.
Ya en el s. XIII, Jaime I hará donación del Castillo y la Villa de Azuébar a Juan Gonçalvez de Heredia (1238), tal como aparece reflejado en el “Llibre del Repartiment”, aunque permitiendo a los musulmanes seguir ocupando sus tierras. Obligada a recibir el bautismo con el paso de los siglos, la población morisca de Azuébar sufrirá las desastrosas consecuencias de la rebelión en la Sierra de Espadán (1529), y finalmente, en el año 1609, se producirá su definitiva expulsión, quedando el término municipal totalmente deshabitado.
La Carta de Población de 1609 concedida por el señor de Azuébar, José Folch de Cardona, facilitó la llegada de nuevos pobladores que iniciaron una nueva etapa, ya exclusivamente cristiana, origen de la actual población.